Las balanzas o básculas, junto con los termómetros y sondas de temperatura, son unos de los instrumentos más utilizados en el proceso productivo de las industrias alimentarias. Sin embargo, aunque las empresas las usan con regularidad, por lo general no siempre hay evidencias de que tengan un control metrológico adecuado.
Es importante que las industrias conozcan cuál es el proceso de pesaje, de forma tal que se aseguren de contar con un adecuado mantenimiento del equipo, y así asegurarse de que el pesaje sea el correcto.
Para ello es importante establecer unas verificaciones y calibraciones periódicas para cada uno de los equipos que se utilizan en el proceso de producción; teniendo en cuenta las características de cada uno de ellos y la función que desempeñan en el proceso.
En el caso de instrumentos de pesaje de funcionamiento no automático que realizan transacciones comerciales y/o determinación del importe total de la venta directa al público y/o preenvasados, la verificación es obligatoria (Orden Ministerial de 27 de abril de 1999). Es imperativo realizar la verificación cada 2 años y siempre después de una reparación o modificación del equipo. Esta verificación será realizada por un Organismo Autorizado de Verificación Metrológica.
Con la verificación se comprueba que se cumplen con los requisitos administrativos y con los errores máximos permitidos para cada tipo de balanza. Básicamente solo se establece que el instrumento es apto o no para su uso.
La calibración es diferente ya que es más compleja. Al equipo se le realizan una serie de ensayos para describir su incertidumbre asociada y sus errores en determinados puntos del rango de medida. La calibración es necesaria para tener la certeza y evidencia de la conformidad del producto con los requisitos establecidos.
Pensando en todas estas cuestiones Estandar gestión alimentaria ha desarrollado los cursos Calibración de balanzas en la industria alimentaria y Calibración y verificación de equipos de medida
Dpto. de Formación