Normas de alimentación como IFS Food (International Featured Standards) o BRC Food Safety (British Retail Consortium) especifican la necesidad de implantar un procedimiento de gestión de residuos en las empresas que opten a certificarse bajo estos estándares. Pero sin ir más allá, la gestión y
el control de los residuos generados en empresas del sector alimentario son necesarios como un prerrequisito de su SGCSA (Sistema de Gestión de la Calidad y Seguridad Alimentaria).
Como ayuda para desarrollar el procedimiento de gestión de residuos de tu empresa, te proponemos que sigas los siguientes pasos:
En primer lugar es fundamental identificar los diferentes tipos de residuos que se generan en la empresa.
¿Son residuos sólidos o líquidos? ¿Plásticos, cartones, materia orgánica, agua residual?
Una vez identificados, debes evaluar el tipo de gestión que requieren estos residuos.
¿Son residuos potencialmente contaminantes para el medio ambiente? ¿Son residuos peligrosos para tu empresa? ¿Se generan residuos químicos? ¿Reactivos de laboratorio, cartuchos de tinta de impresoras, dispositivos electrónicos?
Para ello es necesario informarse y conocer la legislación aplicable del país en el que se sitúan las instalaciones. Como ejemplo, a continuación se indica una relación de la legislación aplicable en España pinchando aquí:
A continuación debes conocer, específicamente, en qué puntos del establecimiento se generan estos residuos y el “camino” que van a seguir. En este punto se tendrán en consideración todos los residuos generados en las instalaciones, incluyendo los residuos generados en talleres de mantenimiento, oficinas, etc.
Este punto es importante para evitar posibles contaminaciones cruzadas entre los residuos y las materias primas o el producto terminado. Para evitarlo se deben de retirar los residuos con una frecuencia tal que evite su acumulación y deben permanecer en todo momento separados de las materias primas y producto terminado, además los contenedores utilizados estarán perfectamente identificados para evitar confusiones.
IFS y BRC indican la necesidad del diseño de un diagrama de flujo interno de los residuos en el que se indique la ruta que siguen para su eliminación evitando el paso por zonas de producción o de almacenamiento de materias primas.
Según el tipo y el volumen de residuos se determinará si existe la necesidad de contratar a una empresa gestora de residuos, en cuyo caso se debe conservar un contrato en vigor y los documentos o registros que acrediten la retirada de residuos.
¿Sigues teniendo dudas?, contacta con nuestro departamento de consultoría. Te ayudaremos a integrar este y otros prerrequisitos en tu SGIA.
Dpto. Técnico