Coronavirus: ¿riesgo emergente en la industria alimentaria?

Los coronavirus son una familia de virus que normalmente afectan a los animales; aunque también pueden afectar a los humanos.

El coronavirus de Wuhan, nuevo coronavirus (2019-nCoV), o coronavirus del mercado de mariscos de Wuhan ha hecho su aparición en el último trimestre de 2019 para convertirse en una crisis a nivel mundial en enero de 2020.

Los síntomas clínicos de la enfermedad causada por el virus incluyen tos, dolor de garganta, fiebre y sensación de falta de aire. (en general como un resfriado común o una gripe). Sin embargo, en casos más graves, la infección puede causar neumonía, insuficiencia respiratoria, fallo renal e incluso la muerte.

Se trata, por lo que conocemos hasta ahora de un virus zoonótico, que ha pasado de una especia animal (probablemente los murciélagos) al ser humano. Además, es más que demostrada la transmisión persona a persona, dadas las infecciones reportadas entre personas que han convivido con afectados.

En la página web del European Centre for Disease Prevention and Control podemos seguir la distribución geográfica de la enfermedad.

No es la primera vez que existe una crisis por una infección por coronavirus. En el año 2012, países de Oriente Medio se vieron afectados por el coronavirus MERS-CoV (Síndrome respiratorio de oriente medio) cuyo origen parecía estar en los dromedarios (y puede que también cabras, vacas y otros mamíferos) y años antes; en 2003 el Síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV), causado también por un coronavirus y con origen en China, afectó a una treintena de países llevando a la muerte a cerca de un millar de personas. El origen del virus, posiblemente también una zoonosis, parecía encontrarse en civetas y murciélagos.

¿Puede el nuevo coronavirus transmitirse a través de los alimentos? ¿Y a través de las superficies?

Las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para prevenir el contagio son claras y en cuanto a alimentación destacan que «se debe evitar el consumo de productos de origen animal crudos o poco cocinados» y que «la carne, la leche o los órganos de origen animal crudos deberán manipularse con cuidado para evitar la contaminación cruzada con alimentos no cocinados».

El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Gobierno de España, en su comunicado del 24 de enero de 2020 indica que “No hay que tomar precauciones especiales con los animales en España, ni con los alimentos, para evitar esta infección”.

Está claro que desde la OMS se intenta prevenir la transmisión zoonótica bajo el presunto caso de que más especies animales puedan estar afectadas o portar el virus transmitiéndolo a ser humano pero, ¿qué sucede con los manipuladores de alimentos? ¿pueden actuar los alimentos manipulados como transmisores del virus? ¿cuánto tiempo puede mantenerse viable el virus en las superficies? Por ahora parece que el virus no soporta más que unas horas fuera del hospedador (no está muy claro cuántas) pero desde el punto de vista de los alimentos producidos en Chica con destino a otros países parece que el riesgo es bajo y por ahora, según indica la OIE (Organización Mundial de Sanidad Animal) respecto a precauciones con los animales vivos o con los productos animales, “no se recomiendan las restricciones comerciales”.

En algunos países empieza a cundir el pánico, no solo por la transmisión entre personas, sino por el miedo a que productos alimenticios con origen en China o “asociados” al país, puedan estar contaminados; pudiéndonos encontrar imágenes un tanto surrealista como la vista en un supermercado de Francia y que mostramos a continuación (no tenemos confirmación de si es o no un “fake”*):

*”Nuestros productos chinos son fabricados en Francia”

Hay que tener en cuenta que las buenas prácticas y las normas de higiene de la mayoría de las industrias tienen una idea clara de la necesidad de apartar al personal enfermo del contacto directo de los alimentos y mantienen un estricto control en lo referente al lavado de manos y limpieza de superficies.

Además, no olvidemos, que por ahora el virus de la gripe común tiene unas tasas de mortalidad y morbilidad que por ahora podrían ser superiores a este virus. Sin embargo, no está de más que los gobiernos tengan en cuenta el principio de precaución.

Desde Estandar, gestión alimentaria, no podemos más que intentar tenerles informados sobre la evolución del 2019-nCoV; sin embargo, sí podemos ayudaros a tener más formación sobre bacterias y virus, a través de nuestro curso Microbiología de alimentos que da comienzo el 6 de febrero. ¿Te interesa? ¡Inscríbete antes de que sea tarde!

 

Dpto. Técnica